sábado, 21 de julio de 2007

Ella te dice que no tiene muchas ganas de caminar. Le parece que estaría buenísimo, para completar la aventura, ir a un "amueblado" a pasarla bien. Te jura que nunca hace eso, pero que le parece que sos distinto a todos, y que se muere por ponerte las manos encima, pero no en tu casa, ya que si bien es osada, prefiere un lugar neutral. Ahí nomás te besa apasionadamente, cosa que ni disfrutás, preocupado como estás por la falta de cash que te acosa, y el exceso de calentura que comienza a perturbarte.

Ya no tenés ni la entrada para Chiquititas, y jamás sacaste una tarjeta de crédito porque "Son para giles". Atormentado, insistís en que vayan a tu casa, o a la casa de ella.

Un poco dudosa, termina aceptando ir a su casa, pero te pide que vayan en taxi, porque se siente un poco cansada. Nuevamente el cash te impide salirte con la tuya.

No podés decirle que no tenés un sope. Terminás diciéndole que mejor la llamás a la noche, porque te acordaste que tenés que presentar un balance de saldos que te viene pidiendo tu jefe desde ayer, y, con un beso rápido, la despedís, no sin antes escucharla cuando te pregunta si sos idiota o te hacés. Al irte, escuchás que grita algo así como pelo....u....o...., pero te parece que no, que son ideas tuyas.


No hace falta que te diga que, no sólo sí te dijo eso, sino que, amigo.... sos un Latin Lúser.